Salimos desde la carretera cerca de Castro Cillorigo, nada más salir del desfiladero y comenzamos por lo que fue el camino que unía Lamasón con Liébana, pasando por Cicera y Lebeña, marcado hoy como PR-3, luego en el encinar giramos a la derecha por unas fuertes pendientes.
Es una cueva que había oído que era difícil acceder a ella, más bien encontrarla, y aprovechando que ahora tenemos el GPS lo intentamos y lo conseguimos, no sin dificultad, ya que al estar próximo a la Peña Ventosa el aparato hacía cosas raras, extrañas, no sabemos si porque se quedaba en sombra de algún satélite o por alguna otra circunstancia.
La ruta es corta pero bonita, para la distancia que hay que son 6,5 km. ida y vuelta son 630 metros de subida y otros tantos de bajada, por fuerza tiene que haber fuertes repechos, además hay algún paso aéreo pero sin más problemas.
Al principio de la ruta y a lo lejos divisamos el pico del Acero, el pico Paña, en las inmediaciones de Colio.
Foto de salida de todos los participantes excepto el que suscribe.
Abajo en el centro el pueblo de Allende.
Otra de la misma zona.
Desde más arriba vemos el pico Agero, también llamado pico Joyu Díaz, que tiene 1.351 m. de altitud y el cueto Agero al que le constan 1.022 m., así que con esta explicación creo que queda claro cual es más alto, o cual es el cueto y cual es el pico.
Este pueblo creo que es Cabañes.
Y por fin encontramos la cueva de la Mora.
Desde el interior se divisa Castro Cillorigo.
El día estaba soleado, así que fuera había mucha luz, de ahí el problema al hacer la fotografía.
Aquí se ve mejor, no hay tanto contraluz. Eso verde son ortigas, finísimas por cierto, y como íbamos con pantalones cortos aquéllas se vengaron de nosotros a base de bien.
Foto de objetivo cumplido, encontrar la cueva, falta el de siempre.
Otra parecida.
La cueva la Mora tiene el piso en horizontal de unos dieciocho metros de profundidad, siendo variable la anchura, menor a medida que se avanza hacia el fondo, sobre el medio hay una chimenea o agujero vertical como de un metro de diámetro, cuando se está cerca del mismo se nota una fuerte corriente de aire.
El suelo de la cueva está llena de excremento de cabras, buen abono sería para huertos, lo peor bajarlo a pie de carretera.
La boca de esta cueva está orientada al oeste, ya he visto a algún avezado montañero ir a buscar la cueva cuando subíamos por la pista desde Lebeña a la Braña de los Tejos. No la encontraron, y es que no está al norte como creían algunos.
Una yedra en la parte derecha de la entrada, decora e identica la cueva, pero no es fácil dar con ella.
Ya en la bajada, antes de pasar al norte, vemos los pueblos de Aliezo y Tama.
Esta es la parte norte por la que subimos y ahora bajamos.
Desde la ruta vemos el collado Pelea, dicen que hace años cuando tenían alguna diferencia entre la juventud de Bejes y de los pueblos de Allende y Cabañes iban a resolverlo a pelearse a este collado que está entre dichos pueblos, sin navajas, palos o piedras, algo brutos eran, pero nobles. Dicen que de eso le viene el nombre al collado.
Bonito y gran encinar.
En la subida y la bajada tuvimos tramos de bastante pendiente.
Otra vista del encinar.
Comimos en un claro que encontramos en el encinar.
Y para abajo por esta fuerte pendiente, aunque no lo parezca, con grijillo de pizarra que lo hacían muy resbaladizo, muy inseguro.
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